miércoles, 14 de mayo de 2014

Las prensas de chatarra

Cuando ya no se puede aprovechar nada más de los restos de chatarra y metal llega el momento de compactarlo y venderlo a fundiciones o empresas relacionadas con el metal. Para hacer este trabajo es imprescindible disponer de una prensa de chatarra que compacte el metal sea cual sea su tamaño. Cuanto más denso sea el paquete obtenido más valioso será en el mercado, con lo que la obtención de una buena presa de chatarra es fundamental. 

Hay una gran variedad de modelos de prensas, dependiendo del resultado que se quiera obtener. Así, unas darán un paquete de un tamaño mayor, más denso o prensarán toda la chatarra con más o menos fuerza. Dependiendo del uso posterior y el transporte podremos elegir un tipo de prensa u otra para obtener unos resultados adecuados. 


Los distintos tipos de prensas de chatarra responden a las necesidades particulares de cada una de las empresas que se dedican a este sector. Así, las hay más pequeñas, que se activan de manera manual por una persona compactando la chatarra pequeña, y otros modelos más grandes utilizados para prensar cantidades más grandes u objetos de un tamaño mayor, como coches o grandes piezas metálicas. 

El tamaño y la finalidad también influye en otro detalle: hay prensas portátiles que pueden llevarse de un lado gracias a vehículos de transporte y otras más grandes que están fijas en un sitio concreto. Estas últimas suelen estar en grandes plantas procesadoras de chatarra que trabajan con un nivel mucho más elevado de estos materiales. 

Gracias a este proceso de prensado de la chatarra se puede aprovechar mejor los deshechos de este tipo de materiales. Además se contribuye al cuidado del Medio Ambiente porque se reciclan y se da un nuevo uso a estos materiales que, de otra manera, acabarían en vertederos y basureros.