El reciclaje de cualquier producto es fundamental para mantener una producción eco sostenible. Los cables pueden aprovecharse y volver a reutilizarse o reciclarse siempre que se haga el proceso de la manera adecuada. Los pasos son los siguientes:
- Recogida: el almacén recibe todos los cables mezclados en grandes cantidades.
- Clasificación: se almacena separando los distintos tipos de cable para poder tratarlos.
- Corte: con máquinas pelacables se separa la parte exterior del cable, hecha de plástico, del interior donde hay cobre, aluminio u otros conductores.
- Triturado: el cable se tritura hasta dejar pequeños trozos.
- Separación: una máquina aspira los filamentos internos, logrando la completa separación en el caso de cables pequeños.
- Procesado: los trozos de plástico o filamentos se procesan para proceder a su reutilización.
Para llevar a cabo este proceso, las peladoras de cables de cobre y las maquinarias especializadas son fundamentales, por lo que sólo debe hacerse en talleres especializados en reciclado.